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¿Cuánta agua nos van a costar estas elecciones?

Sobre el blog

  • ¿Cuánta agua nos van costar estas elecciones?

Volvemos a tener elecciones y ya no solo estamos preocupados porque seguimos sin formar gobierno, también estamos hartos de los gastos económicos y, poco a poco, vamos siendo más conscientes del impacto ecológico que esto supone. Como ya viene ocurriendo desde hace tiempo, entra las cosas que más se pregunta la gente es ¿y que pasa con el impacto ecológico?

Podríamos hablar de muchos aspectos, desde emisiones de CO2 hasta consumos energéticos pasando por residuos que se van a generar, gases de efecto invernadero, etc. Pero nos vamos a centrar en el consumo de agua y la generación de aguas residuales, que supone gran parte del impacto ecológico que conlleva esta nueva llamada a las urnas.

Para las segundas elecciones de 2019 en España, se calcula que seremos 35 millones los votantes llamados a las urnas, es decir, en el mejor de los casos (en el de que todos los españoles ejercieran su derecho), se usarían 70 millones de papeletas y 70 millones de sobres, mitad para votar diputados y mitad para votar al senado. Si además tenemos en cuentan todas las papeletas y sobres que se fabrican pero no se usan y son colocados en mesas electorales o enviados como propaganda electoral, estaríamos hablando de mucho más.

Para un peso de una hoja de papel de 3 gramos y para un peso del sobre de 20, se obtienen 23 por 2 (1 de cada para senado y diputados) gramos de papel usado por votante, es decir, haciendo cálculos, un total de casi 1.900 toneladas de papel fabricado. Pero la realidad es que se fabrica mucho más de los que se usa. Rehagamos el cálculo. Estimando que se fabrican un 15% más de papeletas, una por partido y votante, una para parlamento y otra para senado, y en el caso de los sobres, 2 por votante (uno para parlamento y otro para senado) el resultado es de 4.534 toneladas de papel total que se va a fabricar para estas elecciones.

El agua es fundamental en la producción del papel y no vale con cualquier agua sino que ha de ser de gran calidad

Entonces… ¿qué tiene esto que ver con el agua?

El agua es fundamental en la producción del papel y no vale con cualquier agua sino que ha de ser de gran calidad. Esto provoca que dependiendo de donde estén situadas las plantas sea necesario incluso consumir agua disponible para abastecimiento. Como consecuencia de la larga historia de este sector, el uso de agua esta muy optimizado en los procesos de fabricación y, actualmente, prácticamente el 92,5% de toda la que se introduce en el proceso, vuelve al medio tras ser convenientemente depurada. Los vertidos de este sector son en su mayoría a ríos, lagos, mares y, en menor proporción, a colectores municipales.

Sin embargo, aquí no estamos hablando de los maravillosos avances del sector, que los hay, sino de la fabricación de papel y consumo de agua de forma “innecesaria”. Volviendo al valor calculado anteriormente, 4.534 toneladas de papel, y sabiendo que se usan 310.000 litros de agua por tonelada de papel fabricado llegamos a  1.500.000.000 de litros de agua de los cuales un 7,5% no se recuperará, es decir, 112.500.000 litros se consumirán y se “perderán” por culpa de estas nuevas elecciones.

Por otra parte, todo el agua que se recupera, si se puede, es reutilizada dentro del proceso y finalmente tratada. El flujo resultante contiene más de 250 compuestos diferentes de todo tipo (de origen natural, sintéticos, fenoles, dioxinas, furanos, etc) que debe ser correctamente tratada, lo que conlleva un gran esfuerzo.

Contestando a la pregunta que sirve para titular este post, estas elecciones nos van a costar 112,5 millones de litros. Este solo es un cálculo aproximado, pero sirve para que todos reflexionemos sobre la necesidad o no de realizar ciertos tipos de propagandas electorales, incluso de replantear la posibilidad de la votación eléctrónica. Si se hiciera un análisis profundo en el que se tuvieran en cuenta otros aspectos sobre emisiones, huella de carbono o consumo energético, se obtendrían resultados mucho más contundentes acerca del impacto ambiental que acarrea un acto tan común en el mundo como son unas elecciones y que en los últimos años tanto se repite en España.