La Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA) ha señalado que acaba de adjudicar el contrato para calcular anualmente la huella hídrica de las instalaciones portuarias, lo que permitirá conocer mejor dónde se consume el agua en las instalaciones portuarias de Algeciras y Tarifa, y en qué medida este consumo es susceptible de reducirse.
Según ha indicado la APBA en una nota, de esta forma podrán implementarse acciones de ahorro adicionales a las ya emprendidas por la institución en los últimos años.
Asimismo, ha explicado que para el cálculo de la huella hídrica la empresa adjudicataria, el Centro Gallego de Investigaciones del Agua, usará la metodología de la Water Footprint Network (WFN) que no sólo mide el volumen de agua dulce utilizado, sino que además analiza el ciclo de vida de los productos y servicios. Para ello distingue entre el agua de lluvia empleada (huella hídrica verde), el agua superficial y subterránea (huella hídrica azul) y el agua contaminada (huella hídrica gris).
El cálculo de la huella hídrica de forma regular es una de las actuaciones enmarcadas en la Estrategia Verde de la APBA, con la que se pretende reducir el agua utilizada en el puerto y fomentar su medición entre concesionarios y empresas de la comunidad portuaria, según ha asegurado.
Asimismo, ha indicado que el objetivo es hacer un uso más racional y luchar entre todos de forma más eficaz en un contexto de sequía como el actual, concienciando igualmente a la sociedad de la importancia de hacer una gestión sostenible de un recurso cada vez más escaso.
La APBA ha señalado que la huella hídrica es un indicador medioambiental que mide el volumen de agua dulce que se necesita para fabricar los productos y servicios demandados por la sociedad. Mediante la obtención de datos objetivos, su cálculo aportará a la Autoridad Portuaria la magnitud del impacto generado por la actividad de los puertos de Algeciras y de Tarifa.
La adjudicataria es el Centro Gallego de Investigaciones del Agua, que usará la metodología de la Water Footprint Network (WFN) que distingue entre el agua de lluvia empleada (huella hídrica verde), el agua superficial y subterránea (huella hídrica azul) y el agua contaminada (huella hídrica gris)
Así, la relación directa entre los sistemas hídricos y el consumo humano que establece la huella hídrica sirve para determinar factores como la escasez o contaminación del agua, pero también permite la mejora de la gestión de su producción, de forma que a sus objetivos se suma el de crear conciencia sobre el volumen de agua que requieren ciertos procesos de producción y hábitos de vida para fomentar un uso racional y sostenible.
La Autoridad Portuaria ha señalado que lleva años reduciendo su huella hídrica y ha recordado que en el periodo 2013-2023 el Puerto de Algeciras ha reducido a la mitad su consumo a pesar del crecimiento de actividad registrado en la década, pasando de más de un millón de metros cúbicos anuales, a poco más de medio millón.
En este sentido, ha añadido que esto ha sido posible gracias al impulso de medidas tales como la instalación de sistema de ahorradores de agua en todos los grifos de los aseos de sus edificios; el control exhaustivo de los consumos en el puerto y su zona de servicio mediante la instalación de sistemas de telegestión; o la contratación de una asistencia técnica especializada para la detección temprana de posibles incidencias y fugas en las redes.
Además, para minimizar las pérdidas en su red de abastecimiento, desde 2021 la APBA tomó ya la decisión de reducir la presión en el interior del recinto portuario durante la noche, automatizando para ello la válvula reguladora de la presión en el principal punto de suministro de agua al puerto, ha recordado Autoridad Portuaria, que ha añadido que ha conseguido que los consumos sean estrictamente los necesarios, alcanzando hasta ahora un ahorro aproximado de unos 50.000 metros cúbicos anuales.
Asimismo, ha señalado que con motivo de la sequía actual, la APBA trabaja en nuevas medidas excepcionales que permitan reducir el consumo medio del puerto en un 20% adicional, como son la limitación del suministro de agua potable a buques, el cese de baldeos y riegos de las zonas verdes, y, en el caso de los edificios, bajando la presión y regulando las cisternas de los aseos. Estas mismas medidas se harán extensivas al resto de usuarios del puerto, sobre los que se realiza una evaluación detallada de los consumos.
Finalmente, ha indicado que también ha mostrado su interés en el proyecto de ampliación del ciclo de vida de las aguas de la EDAR ubicada en Isla Verde Exterior y cuyas competencias recaen en la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar. Dicho proyecto permitirá a medio plazo continuar reduciendo la huella hídrica en el puerto utilizando las aguas regeneradas procedentes de la EDAR para los riegos de zonas verdes y baldeos en el puerto, según ha explicado.
