Satisfacción, orgullo y… resaca. Hace solo unos días que ha concluido INVESTAGUA y el balance no puede ser más positivo. Dos semanas de un evento en directo que ha logrado reunir a los más altos responsables de las Administraciones Públicas de todos los ámbitos –estatal, autonómico y local–, líderes empresariales y referentes técnicos de todas las esferas. Los objetivos principales del evento consistían en detallar las inversiones previstas para los servicios y las infraestructuras del ciclo urbano del agua y debatir sobre cómo ejecutarlas, en un tiempo marcado por la inminente llegada de los fondos europeos previstos para la recuperación post-COVID.
Más de veinte altos cargos de toda la geografía española precisaron inversiones por 16.000 millones de euros para los próximos años. En concreto, 7.000 millones anunciados por Teresa Ribera en el marco de la planificación hidrológica, 4.500 millones por las autonomías, 2.700 por las entidades locales y una partida de 1.700 millones en el marco del PRTR. Y es que, tal y como señalaba Carlos Cosín, indiscutible líder empresarial, España se encuentra en un “escenario de oportunidad” inmejorable para revertir una situación que se ha mantenido en el tiempo durante demasiado tiempo.
Además, expertos de primer nivel analizaron en INVESTAGUA las fortalezas y los retos que afronta el sector antes y durante la recepción de los fondos europeos, en áreas tan relevantes como el marco competencial, la fiscalidad, la tarificación y el mercado concesional.
INVESTAGUA también dedicó durante su primera semana sesiones específicas a ámbitos trasversales que deben primar en los criterios de designación y la concreción de las inversiones, como son la epidemiología –clave durante este último año–, el cambio climático, la investigación el desarrollo y la innovación. El evento justificó, además, las necesidades de inversión en todas y cada una de las etapas del ciclo integral del agua: abastecimiento, agua no registrada, saneamiento y depuración, reutilización y economía circular y desalación.
Y como no podía ser de otra forma, INVESTAGUA también puso el foco en América Latina, dando a conocer la situación de crisis provocada por la COVID-19 y detallando cómo la región afronta la salida de esta situación con planes y programas que cuentan con importantes inversiones.
Personalmente, si me piden que elija una sesión me quedaría con la Top Executive Roundtable, en la que altos directivos de empresas líderes mundiales (Miya, Almar Water Solutions, Aqualia, ACCIONA, Gestagua y Schneider Electric), hicieron un llamamiento unánime, solicitando inversiones que permitan mantener y digitalizar infraestructuras sostenibles, apostando por la eficiencia energética y la economía circular, y elevando el valor de la gestión de un recurso obviado por la ciudadanía.
En definitiva, más de cien ponentes, veinticuatro sesiones, doce patrocinadores, cuatrocientos cincuenta delegados de más de veinticinco países, ciento cuarenta reuniones bilaterales y cincuenta mil visitas a la web consolidan a INVESTAGUA como el DAVOS DEL AGUA.
